2 años

La felicidad puede tener muchas caras, la mía hoy tiene tu cara V.

Gracias por invitarme a subir al barco contigo, ha sido increíble, todo: lo bueno y lo malo. Realmente no importa si el camino es largo o corto, si llegamos o no a Ítaca, lo que importa es el tiempo que pasemos juntos, el viaje que nos esta regalando.

El camino recorrido juntos ha sido muy variado, hemos visto pasar las estaciones, las fiestas, la familia, los amigos, incluso la pérdida de un ser amado. Infinitas gracias por compartirlo todo conmigo, por querer ser y estar aquí para mi.

Hace 2 años jamás hubiera imaginado poder hacer tanto, estar en tantos lugares, ser tan yo. Creo que esa es una de las mejores cosas de estar a tu lado: me dejas ser yo, completa, sin restricciones, sin caretas, simplemente yo.

Gracias por ser tu, por dejarte ver tal y como eres, por dármelo todo, por entregarte sin condiciones, por dejarme leer en tus ojos cuanto me amas con sólo una mirada.

No importa si mañana ya no estamos, porque hoy que si es, estamos totalmente. A tu lado he aprendido muchas cosas, si he aprendido bien, aunque a veces parezca que no, ahora se que el amor no se termina en ti y el corazón es tan grande que tiene lugar para muchos.

Gracias por mostrarme que otro mundo es posible. Ich liebe, mon coeur.

In joy & sorrow

I'm in love with you, and you're crushing my heart

all I want is you, to take me into your arms...

when love and death embrace.

Ella lo ha pensado tanto, lo ha imaginado tantas veces, que lo tiene perfectamente planeado en su memoria: puede cerrar los ojos y verse ahí.

Él no se imagina que ella existe, ni siquiera la ha pensado, han pasado tantas por sus brazos, que ha perdido la cuenta: ninguna ha valido la pena, las que han durado son simples espejismos.

La distancia y el tiempo no importan, son secundarios.

Ella ha ahorrado para realizar ese viaje que tiene en mente, sin saber siquiera que ahí, su vida y su corazón tienen destino.

Él cree que ya ha vivido todo, que todo ha pasado tan rápido, no esta cansado, sólo fastidiado de que cada día, cada vez, sea gris.

La lluvia lava, se lleva las hojas, pero también deja un hermoso olor a tierra húmeda, a pasto fresco y a vida que late, que palpita, que se abre paso a la fuerza ahí, donde menos se espera.

La lluvia no se puede llevar la melancolía, es algo que aunque se lave, sigue. El destino es caprichoso, pero siempre certero. La melancolía de él empata a la perfección con la de ella.

El viaje comienza, el juego sin embargo ha sido el mismo de toda la vida. No hay ganadores ni perdedores, sólo historias de amor que nacen y mueren cada día. Ella va hacía él.

Él sin saberlo ya la ansía, la espera.